El príncipe Harry y Meghan Markle se arriesgan a perder sus títulos como duque y duquesa de Sussex por romper su acuerdo con la familia real británica al dar una entrevista al programa de televisión Oprah TV que será emitida esta noche por la cadena CBS.
Los cortesanos reales se reunieron la semana pasada para discutir el despojo de los títulos de la pareja y la ruptura del acuerdo de la “cumbre de Sandringham” hecho hace un año que involucraba su salida de la vida como miembros de la realeza , dijeron fuentes a The Times de Londres .
«No creo que después de esta entrevista, nada esté fuera de la mesa, para ser honesto», dijo una fuente de la casa real al periódico del Reino Unido, refiriéndose a la posible eliminación de los títulos de la pareja.
Tal movimiento sería «un gran paso», admitió la fuente, y enfatizó que destaca lo «enfadada» que está la reina Isabel II por el «circo» en torno al especial de Oprah Winfrey.
Una fuente le dijo al periódico del Reino Unido que Harry y Meghan están «jugando con fuego» con la entrevista y que hay “mucho en juego”.
Aún así, otra fuente cercana a la reina que confirmó las discusiones del Palacio sobre el próximo chat televisivo insistió en que «los títulos no están en debate», enfatizó el Times. Una fuente dijo: “La respuesta dependerá en gran medida de si atacan a la institución o al pueblo”.
En unos de los adelantos del programa, la exactriz acusa a la Casa Real británica de “perpetuar” mentiras sobre ella y su marido. “¿Cómo te hace sentir que el Palacio de Buckingham te escuche contar tu versión?”, dice Winfrey en el extracto de 30 segundos.
“No sé cómo ellos podrían esperar que, después de todo este tiempo, estaríamos simplemente callados si La Firma (un término usado para hablar de la Casa Real británica) está jugando un rol activo para perpetuar mentiras sobre nosotros”, afirma Markle.
The Times publicó la semana pasada que Markle intimidó a dos miembros del staff del Palacio de Kensington. El periódico reportó que una queja por bullying fue presentada en octubre de 2018, cinco meses después de su boda con el príncipe Harry, por Jason Knauf, quien trabajaba como secretario de comunicaciones para los duques de Sussex.
El artículo además afirma que Harry le “suplicó” no proseguir con las acusaciones durante una reunión, la cual el abogado de los Sussex dijo que nunca ocurrió. En tanto, Meghan negó estas acusaciones y dijo que es víctima de una “calculada campaña de desprestigio”.
La californiana aseguró que el periódico británico, “está siendo utilizado por el Palacio de Buckingham para vender una narrativa totalmente falsa basada en información engañosa y dañina” sobre su trato al personal del Palacio de Kensington.
Los abogados de Meghan dijeron que se encuentra “entristecida por este último ataque a su persona, particularmente como alguien que ha sido objeto de acoso y está profundamente comprometida con apoyar a quienes han experimentado dolor y trauma”.
Pero Isabel II ordenó una investigación tras conocer el supuesto maltrato por parte de la ex actriz hacia su personal. En un comunicado, dijo que su equipo de recursos humanos “revisará las circunstancias descritas en el artículo” y buscará hablar con los miembros actuales y antiguos de su personal. “La Casa Real no tolera ni tolerará el acoso laboral”.