Al menos 50 migrantes, 22 de ellos mexicanos, fueron encontrados muertos dentro y en los alrededores de un camión abandonado al borde de una carretera en San Antonio, Texas, tragedia que la Casa Blanca calificó este martes de «horrible y descorazonadora».
El hallazgo se produjo el lunes, cinco años después de un incidente mortal con características similares en la misma ciudad del centro de Texas, a 250 km de la frontera con México.
«Es una tremenda desgracia (…) hasta ahora son 50 los fallecidos: 22 de México, 7 de Guatemala, dos de Honduras y 19 todavía sin información sobre su nacionalidad», informó este martes el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
En su cuenta de Twitter, su canciller, Marcelo Ebrard, aseguró que ese saldo fue proporcionado por las autoridades de Estados Unidos.
«Los pacientes que vimos estaban calientes al tacto, sufrían de golpes de calor, agotamiento por el calor, ya que no había indicios de agua en el vehículo. Era un camión refrigerado, pero no había evidencia de que hubiese una unidad de aire acondicionado funcionando», describió el jefe de bomberos de San Antonio, Charles Hood.
Según las autoridades hay tres personas detenidas por el incidente.
«Estamos siguiendo de cerca» la información «absolutamente horrible y descorazonadora» de San Antonio, indicó la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, a bordo del Air Force One, cuando se dirigía a la cumbre de la OTAN en Madrid.
López Obrador afirmó que el tema de la migración será «central, básico, a tratar» en el encuentro que sostendrá con su par estadounidense Joe Biden el 12 de julio. Es una «amarga prueba» de la necesidad de apoyar políticas que busquen el desarrollo para que la gente no tenga que salir de sus lugares de origen.
«Les insto a todos a pensar de manera compasiva y a rezar por los muertos, los heridos y las familias», pidió el alcalde de San Antonio, Ron Nirenberg, en rueda de prensa.
El papa Francisco expresó su «dolor» por las tragedias de migrantes, haciendo referencia a este drama y a la muerte de decenas de personas la semana pasada que intentaron entrar al enclave español de Melilla.
San Antonio, una ruta principal para los traficantes, sufre una ola de calor récord, con temperaturas que el lunes llegaron a los 39,5 ºC.
El vehículo fue hallado en una carretera cerca de la autopista I-35, una ruta que lleva a la frontera con México.
De acuerdo con el jefe de la policía de San Antonio, William McManus, las autoridades fueron alertadas por primera vez a las 17H50 locales del lunes.
«Grito de auxilio»
«Un empleado de uno de los edificios detrás de mí oyó un grito de auxilio», dijo a los periodistas. «Fui a investigar, hallé el contenedor con las puertas parcialmente abiertas, lo abrí y di un vistazo, hallando varios individuos fallecidos».
La investigación, por «supuesto tráfico de personas», corre a cargo del Departamento de Seguridad Interior (DHS).
«Una mejor vida»
Unos 60 bomberos fueron desplegados para encargarse de los restos mortales, quienes recibirán apoyo psicológico, confirmó su jefe Charles Hood.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, republicano que defiende una línea dura contra la migración, lanzó un duro ataque a Biden y culpó a sus «mortíferas políticas de frontera abierta».
«Estas muertes pesan sobre Biden», escribió Abbott en Twitter.
Su contendiente demócrata en las elecciones legislativas de medio mandato de noviembre, Beto O’Rourke, instó a una «acción urgente» y pidió «desmantelar las redes de tráfico de personas y reemplazarlas» con vías expandidas para la migración legal que reflejen los valores y las necesidades del país.
Camiones como el que se encontró en San Antonio son un medio de transporte muy utilizado por migrantes que intentan entrar Estados Unidos.
El viaje es extremadamente peligroso, sobre todo porque los vehículos de este tipo no suelen contar con sistemas de ventilación o refrigeración.
«El señor tenga misericordia de ellos. Esperaban una mejor vida», escribió en Twitter Gustavo Garcia-Siller, arzobispo de San Antonio. «Una vez más, la falta de coraje para lidiar con una reforma migratoria está matando y destruyendo vidas».
San Antonio sufrió una tragedia similar en 2017, cuando 10 personas murieron sofocadas en un contenedor que se dirigía hacia Estados Unidos y que tenía el aire acondicionado dañado y los orificios de ventilación tapados.
Decenas fueron hospitalizadas por golpes de calor y deshidratación. Se cree que el camión transportaba a hasta 200 personas, pero la mayoría de ellas huyó cuando se detuvo en un estacionamiento. El conductor fue condenado en abril de 2018 a cadena perpetua sin opción de libertad condicional.
Fuente: AFP