El cuerpo de Ismail Haniyeh, líder político de Hamás asesinado hoy en Irán, será trasladado mañana jueves a Doha, donde el viernes tendrá lugar una ceremonia funeral antes de trasladarlo definitivamente a Lusail (Catar) para ser enterrado.
Antes de transportarlo a Doha, por la mañana, se celebrará una «ceremonia funeral popular y oficial» en la capital iraní, anunció este miércoles el grupo islamista en un comunicado.
Al evento en Doha acudirán líderes árabes e islámicos, indicó Hamás, sin especificar quienes.
El líder del buró político del grupo palestino murió en un ataque atribuido a Israel en Teherán, después de participar en la ceremonia de investidura del nuevo presidente de Irán, Masoud Pezeshkian.
El presidente de la Autoridad Nacional Palestina, que gobierna en partes de Cisjordania ocupada, declaró hoy un día de luto por la muerte del líder palestino, que definió como «un acto cobarde y un acontecimiento peligroso», mientras que Irán declaró tres jornadas de duelo.
El secretario general de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Husein al Sheikh, también condenó la muerte del líder político de Hamás, y llamó a uno de los dirigentes del grupo, Jaled Meshal, para darle sus condolencias e insistir en «la unidad y la fuerza de nuestro pueblo».
El 23 de julio, Hamás y la formación secular Fatah, que lidera Abás, firmaron en Pekín una declaración en la que se comprometieron a acabar con la división que impera desde 2007 entre estas dos facciones palestinas y a fortalecer la unidad con el resto de grupos.
Los firmantes, entre ellos la Yihad Islámica, el Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) o el Frente Democrático para la Liberación de Palestina (FDLP), buscan con el acuerdo el establecimiento de un Estado palestino independiente con capital en Jerusalén (un propósito que los grupos ya sostenían de forma individual) acorde a las resoluciones de la ONU.
Según medios hebreos, en el mismo edificio en el que fue asesinado Haniyeh se encontraba también el secretario general de la Yihad Islámica, Ziad Najalah, que sobrevivió por no ser objetivo del ataque.
De momento, ningún alto cargo israelí ha reconocido de manera oficial la operación, aunque algunos ministros han sugerido marcadamente en redes sociales que el país se encuentra detrás de la muerte del líder islamista.
El gabinete de seguridad de Israel, que reúne a los líderes militares y de inteligencia con algunos de los ministros clave del Gobierno, se reunirá esta tarde a las 16.00 hora local (13.00 GMT) para discutir los eventos de las últimas horas.
Anoche, un bombardeo israelí en Beirut mató al líder militar del grupo chií libanés Hizbulá, Fuad Shukr, en represalia por un ataque contra la localidad drusa de Majdal Shams, en los Altos del Golán, que dejó 12 niños muertos el sábado.
La tensión de las últimas horas hace temer a muchos el estallido de una guerra regional, y el líder supremo de Irán, Alí Jameneí amenazó este miércoles a Israel con vengarse por la muerte de Haniyeh.
Aun así, las autoridades israelíes han decidido no aumentar de momento el nivel de alarma militar, un mensaje de tranquilidad a los ciudadanos en medio de la avalancha de noticias.
Fuente: AFP