La República Dominicana se unió este a un grupo de países y bloques que han rechazado los resultados de las elecciones en Nicaragua, celebrada este domingo y donde el presidente Daniel Ortega fue declarado ganador con el 75% de los votos.
A través de un comunicando la cancillería dominicana calificó los comicios como un “simulacro electoral” y afirmó que el proceso “careció de las garantías mínimas necesarias para calificarlo como justo, libre y competitivo”.
Asimismo, instó a las autoridades nicaragüenses a poner en libertad a “los presos políticos y a tomar las acciones apropiadas para el retorno al sendero de la democracia”.
“Hacemos un llamado a las autoridades a colocar en primer lugar el interés de Nicaragua y trabajar para garantizar la plena vigencia de los derechos humanos”, dice el comunicado.
Entre los países que hasta ahora han rechazado los resultados del proceso electoral en Nicaragua, se encuentran República Dominicana, Perú, Ecuador, Chile, Colombia, Costa Rica, Panamá, Estados Unidos y la Unión Europea.
Estados Unidos amenaza con imponer nuevas sanciones a Nicaragua
El gobierno de Estados Unidos amenazó este lunes con imponer nuevas sanciones a Nicaragua, luego de que Daniel Ortega fuera declarado vencedor de unas elecciones que califica de “no democráticas”.
“La elección que el presidente nicaragüense, Daniel Ortega, y su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo, orquestaron hoy, fue una elección de pantomima que no fue ni libre ni justa, y ciertamente no democrática”, dijo Biden según una declaración de la Casa Blanca sobre “la farsa de las elecciones de Nicaragua”.
El régimen de Ortega “amañó el resultado mucho antes del día de las elecciones” al encarcelar a 39 figuras de la oposición, incluidos siete aspirantes a candidatos presidenciales, y “bloquear partidos políticos”, dice el texto divulgado apenas cerraron las urnas.
“El presidente Ortega y la vicepresidenta Murillo de Nicaragua se han declarado ganadores en las elecciones nacionales cuyo resultado era previsible desde hace tiempo”. “Ha privado a los nicaragüenses de la posibilidad de que haya verdaderas opciones, al disolver a todos los partidos de oposición genuinos y encarcelar a todos los principales candidatos presidenciales”, dice un comunicado firmado por el secretario de Estado norteamericano Antony Blinken.
“Estos actos de represión y manipulación electoral, que han recibido el repudio de los nicaragüenses y de la comunidad internacional, privan a los comicios del 7 de noviembre de toda trascendencia verdadera. El gobierno de Ortega-Murillo negó a los nicaragüenses el derecho a votar en elecciones libres y justas y privó ilegalmente de su libertad a casi 40 personas”, apunta.
“Si bien Ortega y Murillo pueden permanecer atrincherados en el poder, la elección antidemocrática de Nicaragua no les proporciona ni puede proporcionarles ningún mandato democrático para gobernar, ni tiene entidad para hacerlo”, dijo Blinken.
“Y si bien sostienen estar ‘defendiendo la soberanía nacional en su respuesta a la condena internacional a su gravísimo comportamiento, los líderes democráticos saben que la verdadera soberanía nace de la ciudadanía —de los votantes— y solamente los gobiernos que llevan a cabo elecciones libres y justas pueden sostener de manera creíble que representan la voluntad popular”, agrega.
Advierte que continuaran usando la diplomacia, las acciones coordinadas con sus aliados y socios regionales y las sanciones y las restricciones de visado para que los cómplices en el apoyo a los actos no democráticos del gobierno de Ortega-Murillo rindan cuentas.
Estados Unidos ya ha impuesto sanciones a Ortega, Murillo y varios nicaragüenses en su círculo íntimo por acciones en el período previo a las elecciones del domingo.
Por la redacción DA