El expresidente de los Estados Unidos, Donald Trump, reiteró que pondrá fin rápidamente al derramamiento de sangre en Ucrania si vuelve a ser elegido en 2024. El republicano también destrozó la política exterior del actual Joe Biden, alegando que ha hecho del mundo un lugar más peligroso.
En declaraciones a sus seguidores en Fort Myers, Florida, el viernes, Trump dijo: “Antes de que llegue a la Oficina Oval, poco después de que ganemos la presidencia, tendré resuelta la horrible guerra entre Rusia y Ucrania. Lo arreglaré muy rápido”.
Explicó que conoce tanto al presidente ruso Vladimir Putin como al líder ucraniano Vladimir Zelensky.
Trump, quien se desempeñó como presidente desde 2017 hasta 2021, afirmó que se llevaba bien con el jefe de Estado ruso y que Putin no habría lanzado su campaña militar contra Ucrania si el hubiera estado en el cargo.
“Todavía es bastante fácil para mí hacerlo”, insistió el republicano, refiriéndose a poner fin al conflicto que se prolonga desde hace más de un año.
Continuó alegando que los líderes de otros países han perdido el respeto por Estados Unidos bajo el liderazgo de Biden debido a su supuesto mal manejo de la política exterior de Estados Unidos. Para recuperarlo, argumentó Trump, “no necesitas balas, no necesitas tanques, no necesitas armas de ningún tipo, solo necesitas algo de sentido común”.
El expresidente estadounidense se describió a sí mismo como el “único candidato” que podría prometer evitar que Estados Unidos se involucre en la Tercera Guerra Mundial.
“Si estas personas incompetentes permanecen en el cargo, habrá una guerra como ninguna otra, con partes beligerantes que utilicen armas nucleares”, advirtió Trump.
El mes pasado, el aspirante republicano afirmó públicamente en al menos dos ocasiones que le tomaría 24 horas lograr que Rusia y Ucrania pusieran fin a la lucha y negociaran si fuera electo nuevamente.
Las conversaciones entre Kiev y Moscú fueron suspendidas en abril pasado por el liderazgo ucraniano. Kiev acusó al ejército ruso en retirada de cometer atrocidades en varios suburbios de Kiev, una afirmación que Moscú ha negado.
En octubre del año pasado, el presidente Zelensky firmó un decreto descartando conversaciones con su homólogo ruso. Esa orden se dio después de que Rusia absorbiera cuatro regiones ucranianas luego de referéndums.
El Kremlin sostiene que, en principio, está abierto a las negociaciones de paz siempre que Kiev renuncie a su reivindicación de los territorios y acepte los términos de Rusia.
Ucrania, a su vez, dice que está decidida a resolver el problema ganando el conflicto en el campo de batalla.