Santo Domingo.- “Le sugiero a esos delincuentes que se entreguen”, fueron las palabras del presidente de la República, Luis Abinader al salir de la casa donde vivía la niña Yulensky Batista Cuevas, asesinada en este sector por delincuentes que habían cometido un atraco momentos antes.
El mandatario fue categórico al afirmar que su Gobierno no tolerará ese tipo de hechos y reiteró que lo mejor que pueden hacer los autores es entregarse.
Al advertir que su Gobierno no va a soportar ese tipo de acciones, el presidente Abinader dijo que las investigaciones del caso están muy avanzadas.
Expresó que está consciente del momento por el que está pasando la familia de la niña, prometiendo que recibirán toda la ayuda y el apoyo del Gobierno.
Aunque reconoció que nada de lo que ahora se haga podrá devolver la niña con vida, dijo que su propia familia y la del ministro de la presidencia Lisandro Macarrulla le ayudarán a tener una casa propia.
A la profesora Julissa Cuevas y Franklin Batista, padres de Yulensky, prometió que el hecho no quedará impune.
El presidente de la República visitó la casa donde vivía la niña asesinada, durante un recorrido hecho por el sector de Los Alcarrizos en la tarde de este domingo.
Durante el recorrido por el sector, el presidente visitó el lugar donde se construirá el mercado de Los Alcarrizos y entregó una partida de 26 millones de pesos para el inicio de los trabajos.
También estuvo en los terrenos donde se construirá la base del teleférico y el hospital Dr. Vinicio Calventi.
Luego continuó su recorrido haciendo una visita a los terrenos donde se levantará el cementerio, para concluir con una inspección por donde se construye la avenida Circunvalación.
Durante el recorrido acompañaron al jefe de estado los ministros de la presidencia Lisandro Macarrulla, administrativo, José Ignacio Paliza; de Obras Públicas, Deligne Ascención; el director de la Policía Nacional mayor general Edward Sánchez González, entre otros funcionarios.