Santo Domingo.- El Gobierno dominicano reafirmó su compromiso con el sector agua, durante un panel organizado por Tecnificación Nacional de Riego (TNR), en el que reconocidos expertos nacionales y extranjeros expusieron la importancia de tecnificar el campo para adaptar la producción agrícola a los efectos del cambio climático y garantizar la seguridad alimentaria nutricional del país.
En las palabras de apertura oficial del evento, el ministro de Relaciones Exteriores, Roberto Álvarez, resaltó la importancia de establecer políticas públicas como la tecnificación del riego para enfrentar las amenazas a la seguridad alimentaria a causa de, entre otros factores, el cambio climático, además de que dichas políticas se traducen en un aumento de la oferta exportable del país.
Mientras que, el director ejecutivo de TNR, Claudio Caamaño Vélez, afirmó que el panel constituye un paso hacia adelante para seguir fortaleciendo la planificación de políticas públicas que garanticen la racionalización del uso del agua en la actividad agrícola y fomenten la incorporación de tecnologías que permitan incrementar la productividad y competitividad de los productores.
“Tecnificar el riego para eficientizar el uso del agua y garantizar la seguridad hídrica y alimentaria no es una opción, es una necesidad imperiosa e inminente. El país está en las condiciones y las capacidades de hacerlo, sobre todo porque es rentable para el Estado y para los productores agrícolas; por lo tanto, es un asunto de seguir fortaleciendo estas políticas públicas”, afirmó.
También se dirigió a los presentes el ministro de la Presidencia, Joel Santos, quien expresó que para nadie es un secreto que el cambio climático pone en riesgo la seguridad alimentaria nutricional, generando pobreza e inequidad, amenazando los recursos hídricos y forestales, así como la biodiversidad y la calidad del agua.
En ese sentido, recordó que el Gobierno lanzó este año el Plan Nacional para la Soberanía y Seguridad Alimentaria y Nutricional 2023-2026, que contiene un componente de cambio climático y gestión de riesgo, con acciones de políticas destinadas a mejorar la sostenibilidad de los sistemas alimentarios a través de medidas de mitigación y adaptación.
Exposiciones de panelistas
Las exposiciones iniciaron con la intervención de Max Puig, vicepresidente ejecutivo del Consejo Nacional para el Cambio Climático y Mecanismo de Desarrollo Limpio (CNCCMDL), quien explicó que el aumento de las temperaturas provoca una mayor necesidad de agua de las plantas y una menor humedad en el suelo, lo que magnífica los efectos de la sequía.
Al abordar el “Impacto del cambio climático en la disponibilidad de agua», precisó que sus efectos están alterando el ciclo del agua, lo que significa que los lugares húmedos se vuelvan más húmedos y los secos más secos, haciendo que las zonas de mayor estrés hídrico sean aún más afectadas.
De su lado, el representante de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), Rodrigo Castañeda, inició su presentación destacando que el hambre y la subalimentación han mantenido una tendencia hacia la baja en República Dominicana, pasando de un 6.7 % en 2021 a 6.3 % en 2022. No obstante, instó a seguir fomentando las innovaciones tecnológicas como la tecnificación de riego para seguir aprovechando el potencial productivo del país.
La agenda continuó con la presentación de Silvio Carrasco, director de la Unidad de Agua de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), quien indicó que la seguridad alimentaria sin la hídrica es imposible de conseguir, pues sin riego, no hay alimentos. Además, invitó a construir más represas para aumentar la captación de agua y mejorar la eficiencia de su uso en los terrenos de cultivo, mediante la implementación de tecnología.
Finalmente, el presidente ejecutivo de la Junta Agroempresarial Dominicana (JAD), Osmar Benítez, concluyó el ciclo de ponencias resaltando que el cambio hacia las innovaciones de riego permite incrementar la productividad de las tierras, así como la rentabilidad y competitividad de los productores, generando una menor volatilidad en los ingresos agrícolas.
En la parte final del panel, realizado en el Centro de Convenciones del Mirex y moderado por el director ejecutivo de TNR, los expositores coincidieron en que la tecnificación de riego debe ser vista como una inversión rentable para el Estado y para los productores agrícolas, y no como un gasto.