Santo Domingo.- El Instituto Duartiano ha hecho un llamado enérgico a las autoridades dominicanas para que enfrenten con determinación y rectitud las acciones criminales relacionadas con la corrupción y el tráfico de inmigrantes haitianos.
La organización patriótica señaló que este problema debe ser tratado como una prioridad nacional y abordado por las principales instancias oficiales, incluyendo la Dirección General de Migración, el Ministerio de Defensa y los servicios de inteligencia del país.
Gómez defendió que cada país tiene su ámbito de soberanía, independientemente de que usted emita una determinada opinión, así manifestó el presidente del Instituto Duartiano, con relación a la situación de Venezuela y República Dominicana.
“Nosotros defendemos la constitución de la república que establece en principio de no intervención en los asuntos internos de otros países es un principio cardinal e irrenunciable de la política dominicana”, sostuvo Wilson Gómez Ramírez.
El Instituto instó al teniente general Carlos Fernández Onofre, ministro de Defensa, a reforzar su compromiso de “tolerancia cero” contra quienes estén implicados en el tráfico de inmigrantes, recordando que esta fue una de las promesas clave al asumir su posición.
Asimismo, pidió al director general de Migración, vicealmirante Rafael Lee Ballester, que escuche a las comunidades fronterizas, quienes son testigos directos de los flujos migratorios y las actividades ilegales en esas zonas.
El Instituto también señaló la responsabilidad del presidente Luis Abinader en hacer cumplir el artículo 10 de la Constitución, que establece el desarrollo integral y la seguridad de la zona fronteriza como un interés supremo y permanente de la nación. Esta disposición incluye medidas para garantizar la integración vial, social, económica y cultural de la frontera.
Entre las preocupaciones expresadas, el Instituto Duartiano destacó la masiva presencia de parturientas haitianas en los hospitales dominicanos, sugiriendo la implementación de medidas económicas y la creación de políticas que reduzcan los incentivos que actualmente favorecen esta situación.
Asimismo, urgió a las autoridades educativas a tomar medidas para controlar la matrícula de estudiantes haitianos en las escuelas públicas, señalando que, en muchos casos, supera a la de los estudiantes dominicanos. Según el Instituto, esta situación afecta directamente el equilibrio y los recursos disponibles para la población nacional.
El Instituto subrayó la necesidad de una política estatal seria y bien fundamentada para abordar la masiva presencia haitiana en el país. Hizo hincapié en que la situación requiere un tratamiento que considere tanto la gravedad del problema como el impacto en el futuro inmediato de la República Dominicana.
“Es indispensable que las autoridades reflexionen serenamente sobre lo que ocurre y actúen pensando únicamente en el supremo interés de nuestra patria”, destacó la organización.