Nueva York.-Siguen los maltratos y humillaciones a los viajeros dominicanos por la aerolínea JetBlue, que cada día son más notorias sus deficiencias en las prestaciones de los servicios que ofrecen en vuelos desde esta ciudad y otras jurisdicciones.
El aeropueerto Internacional JFK, en el condado de Queens, es donde los dominicanos reciben las mayores ofensas y agravios, que van desde los cambios constantes de los horarios de salida de los vuelos con destino a la República Dominicana.
A eso se le agrega el ruin servicio de atenciones al cliente que reciben los usuarios dominicanos en la terminal JFK, a los que le salen mentiras e improperios cuando se van a reclamar sus derechos.
En las redes sociales, abundan los videos, que han subidos viajeros afectados, que han perdidos negocios, trabajos, citas médicas, de inmigración, velatorios de familiares, actividades comerciales y sociales, tardanza en el transporte de cadáveres de fallecidos, en fin es un tormento lo que se pasa viajar por JetBlue.
Al igual que los miles de usuarios que utilizan los servicios para viajar de JetBlue, que han mostrado su indignación por todos estos malos momentos, el presidente de la Cámara de Diputados de República Dominicana, Alfredo Pacheco, se expreso contra la aerolinea, por su comportamiento y “abusos” cometidos contra los dominicanos que viajan con esa empresa.
Pacheco relató su amargo momento con la aerolínea durante un vuelo comercial hacia Puerto Rico, hace algunas semanas, y observó que solo cometían atropellos contra los dominicanos, por lo que pidió al Gobierno, cancelar la licencia.a JetBlue, ya que a su juicio son unos abusadores, al ver como tratan a los dominicanos.
Eso también le ha pasado a importantes figuras dominicanas de la política, el comercio, la industria, el arte, la comunicación, periodistas, empresarios, artistas, a todos los sectores, tanto de aquí como de allá y todo esto sin que los ejecutivos de la empresa, den respuestas contudentes y precisas del mal servicio aéreo que prestan a los dominicanos, específicamente.
La empresa ha prometido solucionar los inconvenientes, pero que se han quedado en la retoricas de la mentiras y las excusar vacías, que han hecho que la indignación crezca y se profundicen.
Por Luis Ramón López