Santo Domingo.- La formación ética en el servicio público será un requisito indispensable, tanto para el ingreso a las instituciones gubernamentales, como para el ascenso y promoción de los servidores públicos y para su participación en cursos internos.
Así lo dispuso el Ministerio de Administración Pública, a través de la circular número 0005370 emitida el 26 de febrero de este año y firmada por el licenciado Darío Castillo Lugo, titular del MAP.
“La certificación del curso sobre ética del servidor público se constituye en un requisito para el ascenso y la promoción de los servidores públicos, así como su participación en cursos internos”, señaló Castillo Lugo.
La circular precisa que “en lo adelante, todo ciudadano o ciudadana que ingrese a ocupar cargo público queda obligado (a) a cursar un programa de formación y capacitación en materia de ética pública, a ser organizado e impartido por la Dirección General de Ética e Integridad Gubernamental (DIGEIG) y el Instituto Nacional de Administración Pública (INAP)”.
La disposición, además establece, que los responsables de recursos humanos de las instituciones públicas deberán organizar, junto a la DIGEIG y del INAP, un curso sobre ética del servidor público para todos los empleados que se encuentran activos en la Administración Púbica, con la excepción de aquellos que ya lo hayan cursado y que lo tengan debidamente acreditado.
Sostiene que los programas de los cursos sobre ética del servidor público que sean impartidos por instituciones académicas del sector privado, deberán ser certificados por el INAP y la DIGEIG.
La circular del MAP manda a que el curso sobre ética del servidor público esté incluido en el Plan Anual de Capacitación de cada órgano y ente que prepara el área de recursos humanos.
Castillo Lugo, titular del MAP, afirmó que desde el inicio de la presente gestión gubernamental y por mandato del Presidente de la República, los titulares de las instituciones responsables de orientar y dar seguimiento a la conducta de los servidores públicos en el ejercicio de sus funciones, han hecho las articulares necesarias para garantizar una efectiva prevención y lucha contra la corrupción administrativa en la Administración Pública.
”En ese contexto, el MAP, en su calidad de órgano rector de la profesionalización de la función pública y del fortalecimiento institucional de la Administración Pública, en alianza con la DIGEIG y con el INAP, ha entendido necesario profundizar el perfil ético de los servidores públicos, reconociéndolo como un requisito primordial para accesar, permanecer y desarrollarse en los cargos públicos”, precisó.
La circular del MAP fue dirigida a los ministros, al Contralor General de la República, al Consultor Jurídico del Poder Ejecutivo, a los Directores Generales, Nacionales y Ejecutivos, a los Administradores Generales y Nacionales de Órganos y entes del Poder Ejecutivo.