Santo Domingo.- La procuradora General de la República, Miriam Germán Brito, dejó entrever que fueron funcionarios del gobierno los que impidieron la salida del país al exprocurador Jean Alain Rodríguez.
En un comunicado dado a conocer este lunes, Germán Brito admitió que la decisión de impedir que el exprocurador saliera del país es ilegal, ya que en contra de este no pesa ningún impedimento de salida.
Dijo que cuando llegó a la Procuraduría fijó su postura sobre las denominadas “alertas migratorias”, que a fin de cuentas devienen en un real impedimento, por lo cual instruyó a su equipo de trabajo para que fueran levantadas o dejadas sin efecto.
Manifestó que al día siguiente de haber tomado esa decisión recibió la visita de dos funcionarios que no son del área judicial, donde además estaban presente a requerimiento suyo, el director de Migración y los titulares del PEPCA y la Dirección de Persecución.
“En esa reunión reitere que las alertas, que a fin de cuentas devienen en un real impedimento, estaban eliminadas, que no eran posibles en nuestra legislación actual; solo segundo mi criterio el director de Migración, en ese momento”, dice Germán Brito en el comunicado.
A continuación, texto íntegro del documento
Aclaración
En mi calidad de Procuradora General de la Republica, y frente a mi equipo de trabajo, he fijado con claridad mi postura sobre las denominadas «alertas migratorias» en la forma en que han venido siendo utilizadas en la historia reciente de institución, al considerarlas reales impedimentos de salida en violación al debido proceso, aun cuando se pretendiesen instrumentar únicamente con la supuesta finalidad de tener conocimiento de los movimientos migratorios de personas bajo investigación.
En ese sentido, instruí que todas fuesen levantadas o dejadas sin efecto, para lo cual compartí mi parecer con el director de Migración, quien estuvo de acuerdo.
Justo al día siguiente de haber tomado esta decisión recibimos la visita de dos funcionarios que no son del área judicial, presentes además a requerimiento mío estuvo el director de Migración y los titulares del PEPCA y la Dirección de Persecución.
En esa reunión reiteré que las alertas, que a fin de cuentas devenían en un real impedimento, estaban eliminadas, que no eran posibles en nuestra legislación actual: solo secundó mi criterio el director de Migración, en ese momento.
Les expresé claro que el proceder mencionando antes de impedimentos de salida colocados administrativamente solo era posible si la ley fuera modificada en este aspecto.
El jueves me entero por los medios que el señor Jean Alain Rodríguez le fue impedida la salida del país, en unas condiciones que resultan más que confusas porque tengo entendido que había abordado un vuelo, luego de haber pasado los controles migratorios de lugar, el avión retorna al aeropuerto debido a un desperfecto técnico, y cuando el señor Rodríguez intenta abordar otro avión, le fue impedido, aun habiendo sido ordenado el levantamiento de las alertas por demás ilegales, y no teniendo el señor Rodríguez impedimento de salida ordenado por un juez.
Haciendo averiguaciones a lo interno de la Procuraduría, hemos procedido a tomar las medidas de lugar para que esta situación no se repita, incluyendo aspectos disciplinarios.
Es el interés de quien dirige este Ministerio Publico, que las normas del debido proceso sean aplicadas a todos y todos los ciudadanos(as) sin importar quien sea.
Este interés está por encima de la valoración, que en términos éticos, nos merezca el eventual beneficiario.
No pretendo participar en investigación, ni decisión que involucre al Sr Jean Alain Rodríguez, no quiero dar lugar a que se le quiera atribuir a alguna malquerencia con el indicado señor, he hablado en ocasiones de una cierta incapacidad mía para el rencor y viene muy bien al caso aquello de que «no hablo de venganzas ni perdones, el olvido es la única venganza y el único perdón”.
Por último, deseo que conste, si alguna vez el Sr Jean Alain tiene algún proceso en esta jurisdicción, me apartaré de él, de manera legal, con la finalidad de que no haya lugar a argumentar supuestos desafectos.
Miriam Germán Brito
Procuradora General de la República
Por la redacción DA