Las tensiones y los conflictos han aumentado en la frontera entre Chile y Perú, dos países que forman parte de las trece naciones que componen la América del Sur, esta situación se ha debido a que la presencia masiva de migrantes en la frontera entre ambos países, se ha intensificado con el bloqueo al paso de personas indocumentadas, lo que está afectando las relaciones diplomáticas de estos dos países.
La situación se ha agudizado después de que el Gobierno de Chile anunciara que los fiscales del país pedirán prisión preventiva para todos los extranjeros indocumentados que estén imputados de algún delito y por otro lado el gobierno de Perú alegando motivos de seguridad, tampoco permite su paso, declarando en estado de emergencia sus zonas fronterizas.
Los migrantes al quedar estancados en la frontera enfrentan el clima inhóspito que caracteriza al desierto de Atacama (lugar no polar más árido de la tierra, con una longitud de casi 1,600 km y un ancho máximo de 180 Km) uno de los más secos del planeta, con días extremadamente calurosos y noches de frío intenso, lo que los ha obligado a armar tiendas de campaña improvisadas con mantas.
La situación ha provocado que la organización defensora de derechos humanos. Amnistía Internacional manifestara, “su profunda preocupación por la situación de precariedad absoluta en la que se encuentran estas personas como resultado de políticas crueles y deshumanizadoras que violan las normas internacionales y leyes de Perú y Chile para la protección de personas en necesidad de protección internacional».
El escenario de esta crisis migratoria es la llamada Línea de la Concordia, entre Perú y Chile, que fue fijada por medio del tratado de Lima de 1929, que estableció la permanencia de la provincia de Arica como parte de Chile y de la provincia de Tacna como parte del Perú, el lado chileno es resguardado por el Complejo Fronterizo Chacalluta y el peruano por el Complejo Fronterizo de Santa Rosa
La situación se ha agravado en las últimas semanas, ya que centenares de personas en su mayoría venezolanos y haitianos y, en menor medida colombianos, permanecen varados mientras intentan infructuosamente cruzar desde la ciudad de Arica, en el norte de Chile, hacia Tacna, en el sur del territorio peruano, lo que puede conducir a una grave crisis humanitaria
Muchos de los ciudadanos extranjeros señalan que Perú solo es un país de tránsito y que intentan regresar a su nación de origen, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), la mayoría de ellos, el 70%, asegura tener la intención de arribar a Venezuela, el 11% afirma que se dirige a México o Estados Unidos u otros destinos y solo el 5% señala que pretende permanecer en el territorio peruano.
El colapso fronterizo ha provocado un intercambio de declaraciones entre los representantes diplomáticos de Santiago y de Lima, las acusaciones y las palabras subidas de tono no han estado fuera de la tensión entre Lima y Santiago en los últimos días. Los desacuerdos en esta materia crecen y ya causaron el llamado a consultas de sus respectivos embajadores.
A pesar de las contradicciones entre ambos países, es necesario buscar salidas al conflicto que preserven no solo los derechos humanos de los migrantes, sino también la integridad territorial y la seguridad de ambas naciones, por lo que creemos saludable para ambas partes el establecimiento de un corredor humanitario que permita repatriar a los ciudadanos que buscan regresar a su país natal.
Se han tomado medidas desde ambos países para tratar de solucionar el problema, en el caso del Perú, declaro en estado de emergencia las regiones fronterizas, lo que permite el despliegue de la fuerza pública para impedir el trayecto de los extranjeros, esta militarización aumenta la presion y la tensión en la frontera y no contribuye al conocimiento del problema humanitario que existe en la zona.
Un dato importante es la migración peruana hacia chile, es el movimiento migratorio más importante de las últimas décadas en Chile junto con la inmigración colombiana y la inmigración venezolana, la peruana, fue la mayor comunidad extranjera residente en Chile entre 1992 a 2015, desde 2017, los peruanos son la segunda comunidad extranjera siendo superada por los venezolanos.
La realidad es que ambas naciones están obligadas a colaborar con el fin de hacer frente a una posible crisis migratoria, que al igual que otras deben ser afrontadas, con el dialogo, el consenso y la buena voluntad de los demás países de la region, para que se asegure un retorno digno y seguro de los migrantes, de modo que se ponga fin al drama de migrantes vulnerables carentes de servicios básicos.
Por Luis Fernández
*El autor es político, comunicador y escritor
Nota: Al final de este trabajo nos llegó la noticia, de que 115 venezolanos, retornaron desde la ciudad de Arica en el norte de chile, a Venezuela en un operativo realizado por el gobierno de ese país.