Consciente de que a muchos amigos y colegas no les caerá bien la posición que desde hace años vengo asumiendo, cuando abogo al igual que otros periodistas, que el Colegio Dominicano de Periodistas (CDP) debe desaparecer tanto aquí como en República Dominicana y otras filiales, por considerar que no está cumpliendo su rol y que solo está creando, disgustos y conflictos de interés, me la juego al expresarme.
Son muchas las razones que una gran cantidad de periodistas de los que nos oponemos a que el CPD siga teniendo vida, que si las enumeramos todas, quienes no estén de acuerdo con nuestra posición, al analizarlas, se darán cuenta que tenemos la razón y se voltearan como la tortilla mejicana cuando ya está lista.
Somos muchos los periodistas dominicanos que alrededor del mundo nos hemos sentido atropellados, marginados y hasta denigrados por quienes están llamado a resguardarnos, ayudarnos y solidarizarse con cualquier causa que lo amerite, sin vernos por encima del hombro, sabiendo lo difícil que es este oficio o profesión.
La mayoría de las direcciones que hemos tenido los periodistas (colegiados o no) tanto en la filial de Nueva York como en la República Dominicana, han tenido enquistado un anillo de mafiosos que, si usted no es de su entorno, a ellos les importa un bledo su situación y solo sacan la cabeza cuando se aproxima el 5 de abril, día del periodista, celebración que muchos ni saben el porqué de ese día.
El enojo y el disgusto de muchos colega es tanto, que aquí en Nueva York se convocó a los miembros del CDP que tiene una matrícula de más de 100 para escoger la Comisión Electoral que montará las próximas elecciones del gremio y solo asistieron 28 muchos de los cuales parece que los llevaron obligado a juzgar por la foto publicada.
Veo con mucha tristeza una posible división tanto aquí como allá porque como muchos sabemos, el horno no está para galletitas después de lo sucedido con las pensiones, lo que está motivando a un grupo de comunicadores y periodistas de verdad que hacemos vida periodística, a formar una asociación o algo que le duela su clase, porque quienes nos han dirigidos por los últimos 25 años, no pasaron la materia.
Para las próximas elecciones se están conformando planchas que como los políticos, prometen mucho y al final es más de lo mismo, como dicen por ahí, de buenas intenciones está lleno el purgatorio, y como estamos cansados de eso, abogamos porque desaparezca el CDP, si alguien quiere acompañarnos a buscar soluciones a tantos comunicadores y periodistas colegiados o no, estamos presto a lo que sea.
Por Víctor Gómez (gomper55@hotmail.com)
El autor es periodista y locutor. Reside en Nueva York