La necesidad tiene cara de hereje

Siempre escuchaba a mi difunta madre repetir, en algunas ocasiones, el siguiente refrán: “La necesidad tiene cara de hereje.”

Especialmente utilizaba esta expresión cuando alguien cometía un error, creyéndose la gran cosa, pero la situación se le ponía tan difícil, que se arrepentía, e inclusive, tenía que pedir perdón.

No sé por qué razón esto ha venido de manera tan repetida a mi mente, he querido justificarlo, debido a que siempre he sentido una gran fascinación por esas expresiones populares, tan certeras, como son los refranes.

Me puse a investigar: primero, qué significa la palabra hereje y encontré varias definiciones. Elegí aquella que dice que son personas que niegan los dogmas establecidos en una religión. Fuente: https://dle.rae.es/hereje

Ahora bien, lo que más llamó mi atención, fue lo siguiente:

“ Necessitas caret lege  se puede traducir del latín como: la necesidad carece de ley. La frase fue mal interpretada en el castellano como: la necesidad tiene cara de hereje. El desvío debe fomentarse entre los desconocidos del latín, entre las clases no educadas. Es posible que al pronunciarla encontremos resonancias entre caret y cara, y lege y hereje. Esta deformación fue recogida y recreada por Luis de Góngora en uno de los versos de la letrilla Dineros son calidad (1601):

No hay persona que hablar deje al necesitado en plaza; todo el mundo le es mordaza, aunque él por señas se queje; que tiene cara de hereje, y aun fe, la necesidad: verdad

La deformación popular mantuvo la connotación disidente de la locución original y lo hizo con la figura del hereje que puede ser entendido como alguien que no reconoce la ley o el orden. Pero puede decirse que la esencia de la frase original se sostiene con el sacrificio de la gramática al asumirse una forma no resuelta. La utilidad y significado de la máxima se ponen de manifiesto en su propio sacrificio”. Fuente_https://www.ernestooroza.com/la-necesidad-tiene-cara-de-hereje/

Después de tanto investigar, analizar y teorizar, llegué a la conclusión de que acepto como buena y válida la afirmación del pueblo, pero me queda la duda: ¿Cómo tendrían la cara los herejes?

Por Epifania de la Cruz (epifaniadelacruz@ gmail.com / www.renacerparatodos.net)

*La autora es psicóloga clínica

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