El pueblo mexicano en las elecciones efectuadas el domingo 2 de junio de este año, esperaba con ansiedad la elección de una presidenta, para sustituir al presidente Andrés Manuel López Obrador, lo cual fue logrado con el contundente triunfo de Claudia Sheinbaum, al obtener el 58.8%, superando el 53.3% obtenido por López Obrador en el 2018, convirtiéndose en la primera mujer electa presidenta en 200 años de independencia.
Este hito histórico de tener una mujer por primera vez como presidenta, significa un espaldarazo del pueblo mexicano a las políticas aplicadas por el presidente López Obrador, quien se había comprometido en el periodo para el cual fue electo 2018-2024, a llevar a cabo la cuarta transformación de la vida pública que pusiera al pueblo de México en el centro de las políticas de desarrollo social.
Esta cuarta transformación, viene precedida de tres grandes transformaciones en la extraordinaria historia de México, caracterizada por la lucha por la libertad, la justicia, la igualdad y por la defensa de su soberanía nacional, país que tiene una herencia cultural milenaria, de dónde se desprende la gran vocación del pueblo por el trabajo, por la creatividad y la solidaridad.
La primera transformación fue a principios del siglo XIX, cuando después de 300 años de colonia, México obtiene su independencia el 16 de septiembre de 1810. Dos curas rebeldes, Miguel Hidalgo y Costilla y José María Morelos y Pavón encabezaron un movimiento para que se logrará la independencia de México y también un movimiento en favor de la justicia, porque fueron los primeros en proclamar la abolición de la esclavitud.
La segunda transformación de trascendencia mundial fue el movimiento de la Reforma que ocurrió a mitad del siglo XIX, el cual fue encabezado por un indígena y gran dirigente llamado Benito Juárez, quien Separó al estado de la iglesia, antes que en otros países y llevó a la práctica el principio bíblico de “lo que es de Dios, es de Dios y lo que es del César, es del César.
La tercera transformación fue a finales del siglo XIX y principios del siglo XX, esta fue la revolución mexicana de 1910, una lucha por la democracia y contra la dictadura de Porfirio Diaz, que termino con la promulgación de la nueva constitución de los Estados Unidos Mexicanos, siendo está a nivel mundial la primera en reconocer las garantías sociales, los derechos de los trabajadores y otras importantes conquistas.
El pueblo mexicano dio un gran paso de avance, con la elección de Andrés Manuel López Obrador, para ocupar la presidencia de México en el periodo del 2018-2024, con más del 53% de los votos lo que fue una renovación de las esperanzas de un pueblo cansado de falta de democracia, desigualdad social, constante violación de los derechos humanos, altos niveles de corrupción de la sociedad mexicana de la época, y hartazgo de los mexicanos con el sistema político tradicional.
López Obrador inicio un verdadero cambio en el país con su cuarta transformación, en un discurso pronunciado en el 2022, el mandatario explico los principios políticos, económicos y sociales de esta, constituidos por, atención especial a los pueblos indígenas, acabar con la corrupción y los privilegios, que el pueblo sea libre y democrático, justicia social basada en las necesidades populares.
Además, distribución equitativa del ingreso y la riqueza, disminución de la pobreza, crear las condiciones para que la gente pueda vivir feliz y libre de miserias y temores, alcanzar el ideal de vivir en una sociedad mejor, más justa, igualitaria y fraterna, programas sociales en favor de la población desfavorecida y la recuperación del papel del Estado en la rectoría de sectores como la economía.
Esta cuarta transformación será continuada por la primera presidenta electa mexicana Claudia Sheinbaum, quien declaro al agradecer al pueblo mexicano su elección que, “Quiero agradecer a millones de mexicanas y de mexicanos que decidieron votar por nosotros en esta histórica jornada para avanzar con la cuarta transformación de la vida pública de nuestro hermoso país. Es el reconocimiento del pueblo de México a nuestra historia, a resultados, a la convicción y a la voluntad, pero, sobre todo, es el reconocimiento del pueblo de México a nuestro proyecto de nación”.
La primera mujer que gana unas elecciones presidenciales en México, lo ha hecho en una jornada histórica que ha arrojado una aplastante victoria para el partido del gobierno, el Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) y sus aliados el Partido Verde ecologista (PVEM) y el Partido del Trabajo (PT), el triunfo ha sido abrumador, apabullante, lo que ha consolidado a MORENA, como la principal fuerza política mexicana.
Claudia Sheinbaum, MORENA, el PT, el PVEM y los sectores sociales progresistas del pueblo mexicano tienen un gran reto ante si, que es seguir profundizando los cambios planteados a través de la cuarta transformación, importante proyecto de izquierda progresista que promete renovar los cimientos de la sociedad mexicana, reduciendo la pobreza y desigualdad y generando desarrollo en las regiones más abandonadas.
El triunfo popular de Claudia Sheinbaum en México no solo es una victoria del pueblo mexicano, sino un importante paso de avance de las fuerzas progresistas del continente latinoamericano y el caribe, que cada vez más consolidan sus fuerzas, en la lucha por un mundo mejor, multipolar, equitativo y solidario, unido en el camino de mejorar la calidad de vida de la gente.
Por Luis Fernández
El autor es politico, escritor y comunicador