Es una negra hermosa, coqueta y con un cuerpazo espectacular, que vive en mi sector.
Quizás algunos de los que siempre me leen, recuerden aquella ocasión en que escribí sobre la vieja Chichí, una señora encantadora, amiga de todos los “tigueres” del barrio. Durante mucho tiempo fue nuestra vecina, y a pesar de tener una pierna muy enferma, todos los días por la mañana, me llamaba por la ventana para brindarme un café calientito.
Pues les informo que esa señora, es la madre de esta morena voluptuosa sobre la que hoy escribo.
Además de su llamativo andar, del escándalo que hace al hablar y su risa estrepitosa, tiene un negocio muy peculiar, pues, hasta ahora, no he conocido a nadie que realice otro igual.
A ver si la puedo definir: Es una especie de compradora-delivery, con una cantidad de clientes a quienes brinda sus servicios. Con sus propios recursos, va a las tiendas y compra todo lo que ya le ha sido solicitado y, por si fuera poco, los entrega a domicilio. Además de este detalle, todavía les da un margen de tiempo para que le hagan efectivo su pago.
Es, prácticamente, una “resuelve problemas”, desde que empecé a negociar con ella, se encarga de comprarme diferentes artículos, para mencionar algunos: Aceite para el cuerpo, shampoo, toallas, colorete, almohadas, cremas, artículos para el hogar, en fin, todo lo que le solicito, cuyo precio esté dentro del presupuesto que ella maneja.
Su trabajo es muy serio y lo realiza con una profesionalidad fuera de serie, siempre está atenta a sus pedidos y los resuelve en el menor tiempo posible.
Le dicen “Mella” porque es melliza con otra chica, y lo de “Ya” se lo puse yo, al ver el trabajo tan profesional que ella realiza, se me ocurrió asociarlo con “Pedidos Ya”.
Aunque es una persona sociable, bullosa y hasta burlona, esto se contrapone con la seriedad tan grande que pone al atender sus pedidos, y por encima de todo, su objetivo principal es la satisfacción de sus clientes.
En mi caso, además de resolverme todo lo que necesito, en el menor tiempo posible, la considero mi amiga.
Mella, mi respeto y admiración por el trabajo que con tanta seriedad realizas. Si usara sombrero me lo quitara, para hacerte la reverencia.
Por Epifania de la Cruz (epifaniadelacruz@ gmail.com / www.renacerparatodos.net)