Santo Domingo- Las enfermedades inflamatorias intestinales (EII) afectan a más de 10 millones de personas en todo el mundo y tienden a presentarse cada vez más en pacientes jóvenes, incluso antes de los cinco años de edad.
Liliana Jiménez, gastroenteróloga de los Centros de Diagnóstico y Medicina Avanzada y de Conferencias Médicas y Telemedicina (CEDIMAT), indicó que esos hallazgos tienen implicaciones importantes, porque los niños vivirán más tiempo con la condición y generarán costos más altos para la atención, en comparación con los adultos.
Estas enfermedades, incluyen dos principales entidades: colitis ulcerosa (CU) y enfermedad de Crohn (EC), tienen como base un trastorno inmunológico generalizado, a menudo asociado a un déficit nutricional importante y en ocasiones conllevan a requerir terapias muy complejas para lograr controlarlas y aminorar las repercusiones a largo plazo.
“Provocan inflamación del sistema digestivo y cursan con brotes (actividad) y con etapas de remisión (inactividad). Se desconoce su origen, aunque se cree que pueden estar provocadas por la interacción de factores inmunológicos, ambientales y genéticos. Son más frecuentes en los países desarrollados y existe mayor predisposición en ciertas familias”, afirmó Jiménez.
Agregó, que en los niños las manifestaciones extraintestinales suelen predominar sobre los síntomas digestivos, la artritis, la fiebre de etiología desconocida, anemia, o el retraso de crecimiento pueden ser un síntoma de presentación, mientras que puede no haber dolor abdominal ni diarrea, dijo la galena.
La gastroenteróloga puntualiza que cada vez más se han ido incrementando los casos de pacientes con EII en Latinoamérica, y República Dominicana no está exenta de este exponencial incremento en el surgimiento de nuevos casos.
Además, señaló que entre un siete y 20% de todos los casos nuevos de EII aparecen antes de los 18 años. Si bien globalmente es más prevalente la CU, en el niño predomina la EC.
La médica explicó que la EC puede afectar desde la boca hasta el ano, incluyendo todas las capas del tubo digestivo (inflamación transmural). A nivel mundial, se puede mencionar que los síntomas más característicos incluyen diarrea y dolor abdominal.
Añadió que pueden ocurrir abscesos, fístulas internas y externas (alrededor del ano) y obstrucción del intestino, de igual manera, haber síntomas extraintestinales, en particular artritis, afección de la piel, entre otras, que pueden anticiparse incluso a los síntomas intestinales.
Los médicos ante todas las señales de la historia clínica del paciente deben pensar en el diagnóstico para poder identificar a tiempo la EC y ofrecer un tratamiento adecuado y oportuno, evitando así las consecuencias de esta enfermedad crónica que afortunadamente puede ser controlable.